Xavi Hernàndez - EUROPA PRESS
Piqué tiene los días contados en el Camp Nou
La relación entre el FC Barcelona y Gerard Piqué no está pasando por un buen momento. El capitán, que durante muchos años ha sido idolatrado por la afición, es hoy un problema por el vestuario. Los seguidores azulgranas consideran que no tiene el nivel para vestir la camiseta azulgrana y, el que es peor, no se esfuerza y no tiene actitud. En este sentido, en el Camp Nou lo vimos calentando con pocas ganas, apoyándose sobre el banderí de corner y sin ganas de correr.
Xavi Hernàndez, con mentiras piadosas, lo defendió a la rueda de prensa y consideró que era un jugador ejemplar. Aun así, ha demostrado que no confía en él y que solo lo hace jugar cuando no hay más remedio. La estrategia para que el catalán no vuelva a jugar es clara: reconvertir Marcos Alonso en central. El madrileño es lateral izquierdo, pero también puede jugar al eje de la defensa.
La afición pide a Piqué que cumpla su prometida de Lisboa
De forma que con la ausencia de Jules Koundé, Ronald Araújo y Andreas Christensen, que juegue Piqué y Eric Garcia no es la única posibilidad. Puede jugar el madrileño y el ex del Manchester City. En este sentido, contra el Villarreal en el Camp Nou (3-0), Xavi utilizó este sistema e hizo jugar Marcos Alonso de central (con Koundé) y Jordi Alba de lateral.
“Se puede adaptar, ha hecho un gran encuentro. Tiene condiciones para ir al espacio, tiene capacidad de ganar duelos individuales, va bien en salida de pelota y además es izquierdista, que para nosotros nos va de maravilla. Buen nivel de Marcos”, dijo Xavi.