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Los Registros Civiles de España no lo permiten
Cuando un niño o una niña nace hay que ir al Registro Civil para inscribir su nacimiento. Este organismo público elabora su partida de nacimiento y lo inscribe como una nueva persona dentro de la sociedad. Entre sus datos, se recoge su nombre, los apellidos, quienes son los progenitores, donde ha nacido y en qué fecha ha nacido. Es el momento en que muchas familias se preguntan si vale todo, si se pueden poner todos los nombres.
La respuesta es fácil y contundente. La normativa que regula el Registro Civil no permite poner cualquier nombre. No hay una lista cerrada, pero el artículo 54 de la Ley de 8 de junio de 1957 sobre el Registro Civil “quedan prohibidos los nombres que objetivamente perjudican a la persona” y añade que tampoco estarán permitidos aquellos nombres que “hagan confusa su identificación y los que induzcan a error en cuanto a sexo”.
Las decisiones del Registro Civil son apelables judicialmente
Igualmente, en España no es posible tener más de un nombre compuesto ni más de dos simples. Igualmente, dos hermanos tampoco se pueden llamar el mismo nombre, excepto que el mayor hubiera fallecido antes del nacimiento del segundo. Tampoco pueden tener el mismo nombre aunque este nombre esté registrado en diferentes idiomas, por ejemplo, Jordi y Jorge.
A pesar de que no hay una lista cerrada, a menudo se ponen ejemplos de nombres propios históricos que nunca un registrador aceptaría como Hitler, Judas, Stalin, Osama Bin Laden y otros por su connotación negativa como ‘caca’, ‘pedo’, ‘loco’, ‘loca’, ‘feo’, fea‘ etc. Por el contrario, a pesar de que la decisión final corresponde al Registro Civil, sí que se pueden poner nombres mitológicos o relacionados con la geografía como: Arán, África, Asia y tantos otros.